Valencia: mucho más que una paella

Si España es el tercer país más visitado del mundo, -tan sólo superado por Francia y EE.UU-, por algo será. Y es que el pasado año, más de 75 millones de turistas se pasearon por nuestras ciudades, costas y montañas disfrutando del encanto de nuestro país. Uno de los principales motivos que mueven a los turistas a venir aquí es, a parte de la fórmula sol y playa, la gastronomía tan extensa que se puede catar en bares y terrazas.

De hecho, uno de los iconos nacionales de nuestro país, es la paella valenciana. En las tiendas de souvenirs la encontramos en cientos de formatos diferentes; en imanes para la nevera, llaveros e incluso kits para prepararla en casa. Los valencianos estamos orgullosos de que uno de los mayores símbolos de la gastronomía española sea, por excelencia, la paella. Lo que no nos gusta tanto es que hayan salido centenares de imitadores que se dedican a ‘reinventarla’ a base de ingredientes que nada tienen que ver con la receta original.

Es probable que, quien visite cualquier parte de España, se encuentre con alguno de estos establecimientos que ofrecen a los visitantes la posibilidad de catar este plato tan conocido. Pero solo los que vengan a Valencia, podrán probar la auténtica paella valenciana, porque en esta ancestral receta, hasta el agua utilizada será decisiva para su sabor y textura final.

Pero quien viene a Valencia, viene por muchas cosas más que por una paella. Valencia posee un recetario muy extenso de gastronomía única e increíble. La famosa horchata con fartons es tan sólo una de tantas recetas extraordinarias que hemos ido preservando como si de tesoros se tratasen.

Aunque los arroces son nuestra especialidad, como el arroz negro o el delicioso arroz al horno, existen otras muchas fórmulas que consiguen que se le caiga la baba a todo el que las prueba; la fideuà es una de ellas. En cada rincón de la Comunitat Valenciana encontramos joyas comestibles; desde los embutidos de Utiel hasta los vinos de Requena, pasando, como no, por el delicioso turrón de Jijona o el de Alicante. Valencia es el paraíso de la gastronomía mediterránea.

Los mariscos y pescados son otro de nuestros fuertes; las tellinas con limón, la sepia a la plancha con ajo y perejil, el arroz con bogavantes o los mejillones al ajillo. ¡Todo ello recién sacado del mar, y por supuesto, delicioso!

Pero si algo es protagonista de nuestras fiestas y comilonas, eso es el Agua de Valencia, una receta que combina nuestra fruta por excelencia,- la naranja,- con el cava y mucho mucho azúcar, y que enamora a todo aquel que la prueba. Por no hablar de los buñuelos, ese dulce típico a base de calabaza, pero que se ha reinventado con otros ingredientes.

La Comunitat Valenciana posee un gran encanto turístico. Sus playas, sus fiestas, su música y su cultura enamoran a cada turista que la visita. Pero lo que de verdad hace que vuelvas, son esos platos que se quedan marcados en tu paladar, aquellos que luego intentas hacer en tu casa, aquellos que recomiendas a cualquiera que venga a visitarnos. Porque Valencia es única, y su gastronomía también.

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