El modernismo valenciano forma parte de la corriente artística que se desarrolló en toda Europa, pero con una particularidad: la influencia de la Sezession (versión austríaca del modernismo). Se caracteriza, entre otros conceptos, por el predominio de las formas naturales, su asimetría, las pinceladas orientales, el mosaico Nolla y una fuerte presencia de la simbología de la región. Si vas a venir a la playa de Valencia en breve, no dejes de visitar lo que ahora te proponemos.
Los mejores ejemplos del modernismo valenciano
Posiblemente, conocer Valencia es sinónimo de pasar por la magnífica Estación del Norte, que podrás recorrer en su totalidad para apreciar las características arriba indicadas, pero hay otras joyas que te sorprenderán.
El edificio de Correos
Está a pocos metros de la estación. Se construyó entre 1915 y 1922 y mezcla todas las tendencias modernistas. Su impresionante altura se confirma en la sala principal, que consta de 370 paneles con los escudos de todas las provincias españolas. El escudo de forja del centro es el de la ciudad. En la cubierta puedes observar una torre metálica, a modo de remate de esta obra maestra.
Edificio Suay
Justo al otro lado de la plaza del Ayuntamiento, encontrarás este edificio construido en 1910. Su mirador circular de tres plantas, el remate de la zona superior y, una vez más, la forja de hierro de sus balcones son sus rasgos más representativos.
Casa Ernesto Ferrer
En la misma plaza y construida por Almenar Quinzá en 1913, es de esos edificios que puedes mirar durante horas para entusiasmarte. Su cúpula superior, sus balcones en piedra y su solemnidad te encantarán.
Y estos son solo algunos ejemplos de lo que podrás encontrar durante tu recorrido por la ciudad. Termina tu andadura comiendo en la playa de Valencia, déjate llevar por sus encantos y convierte tu viaje en el primero de una larga serie.