Se acerca la Semana Santa y con ella la tradición de comerse la mona de pascua en Valencia. La ciudad de la Paella también tiene su ritual para la mona de pascua, un dulce que hace las delicias de mayores y pequeños.
Un magnífico plan es aprovechar el buen tiempo para ir a una Arrocería o restaurante por malvarrosa y merendar la mona de pascua en la Playa, aunque también podemos ir a comernos la mona al río o al campo, como manda la tradición.
La mona de pascua se come el Domingo de Resurrección o el Lunes de Pascua y el rasgo que más identifica las monas de pascua valencianas es el huevo. Antiguamente, las monas iban decoradas con un huevo duro que según la tradición se tenía que romper en la frente de alguien, pero con el paso de los años los huevos de chocolate han sustituido a los huevos duros.
Hacer una mona es fácil: solo necesitamos harina de fuerza, levadura de panadero, huevos, azúcar, aceite de oliva, la ralladura de un limón y algo de sal. Una vez hecha la masa, le podemos dar la forma que queramos. En los hornos es habitual encontrar monas con forma de cocodrilo, de pato o de cualquier animal, además de las simples monas redondas con el huevo en el centro. Si la haces en casa, serás tú el que elijas la forma que más os guste.
En resumen, las monas son un espectáculo de color, ya que se suelen decorar con anisetes de colores, pasas o virutas de chocolate. Antes el huevo duro también se pintaba, aunque su sustitución por los huevos de chocolate ha hecho que se pierda la tradición de pintar el huevo en familia. Ahora que ya sabes como hacer una mona de pascua 100% valenciana solo te falta preparar el cachirulo y volarlo mientras te comes la mona para merendar.