Cuando pensamos en la gastronomía de Valencia, inmediatamente nos viene a la cabeza una sabrosa paella servida en la playa por una arrocería tradicional o un restaurante de la Malvarrosa, pero estas tierras nos ofrecen otros muchos productos y platos igual de sabrosos y que merece la pena conocer. Las ñoras de Guardamar se encuentran entre ellos.
Las ñoras de Guardamar se cultivan en las dunas del mismo nombre, en tierras de Valencia. La fina arena que forma su suelo y el clima mediterráneo típico de Valencia les dan un sabor especial.
Además, el proceso tradicional de secado que se usa para su conservación las convierte en uno de los mejores condimentos de la cocina española.
De hecho, la calidad de la ñora es tan excepcional que los mejores restaurantes de España la usan para realzar sus platos, gracias a su sabor y color únicos.
Una de las grandes ventajas de la ñora es su polivalencia, ya que se puede utilizar para condimentar y dar realce a platos tradicionales. Asimismo, también en las creaciones contemporáneas de los grandes chefs la ñora de Guardamar encuentra su espacio como el complemento natural de sabor más personal. De todos modos, es siempre un ingrediente indispensable de las recetas de arroces valencianos.
Aunque la ñora de Guardamar está presente en numerosas recetas, no podemos dejar de destacar un plato singular del que es la completa protagonista, el tocinillo de ñora. Este plato combina azúcar, huevo y ñora para dar lugar a un original postre que se sirve con helado de dátiles. Para su elaboración, se mezcla la pulpa de la ñora con el resto de ingredientes y se hornea durante más de hora.
Sin duda, la ñora de Guadarmar es uno de los condimentos con mayor personalidad propia dentro de la cocina valenciana y española.