La paella es el plato típico por antonomasia de la gastronomía valenciana. Sin embargo, en muchas ocasiones cometemos errores en su elaboración. Descubre algunos de los más habituales para no volver a caer en ellos y poder disfrutar de esta receta en todo su esplendor.
Principales errores al cocinar una paella
El principal fallo es añadir ingredientes que nada tienen que ver con la paella. Ni cebolla ni chorizo, como hizo en su día el afamado chef Jamie Oliver, casan con este plato. No te salgas de las verduras y las carnes habituales (pollo, conejo y costilla de cerdo).
Tampoco debes caer en la trampa de emplear caldo ya elaborado. Uno de los secretos de las paellas es que, una vez que tienes cocinado el sofrito, al echarle agua se crea el propio caldo que es en el que luego va a hervir el arroz.
¡Ojo! El agua que acabamos de nombrar también puede jugar en tu contra. Debes atinar con la cantidad exacta porque, de lo contrario, te encontrarás con un arroz meloso (por exceso) o crudo (por quedarte corto), cuando el grano de la paella se caracteriza por ser seco.
Al hilo de ese fallo, también es frecuente equivocarse con el tipo de arroz escogido. Aquí no hay opción: el redondo. Dentro de sus variedades puedes escoger cualquiera, pero nunca usar el largo o un basmati.
Por último, aunque conocemos como paella el plato en sí, realmente este es el nombre del recipiente en el que se elabora. Y este deberá tener un diámetro suficiente para que el arroz no supere el medio centímetro de grosor. Si la cocinas en cazuelas u ollas, estarías hablando simplemente de un plato de arroz.
Donde no cometemos estos errores con la paella es en restaurante Casa Isabel. Situados en la misma playa de Valencia, somos expertos en todo tipo de cocina mediterránea.
